Reflexiones #8M2021

Consuelo


La mujer y el hombre somos criaturas del mismo Dios creador con sexos distintos y estructuras biológicas y genéticas distintas que conforman nuestras vidas.
Ahora bien, la mujer formada. Preparada y ejerciente enriquece la abogacía de tal modo que al obrar masculino más tendente a regirse por la razón y la lógica y por la costumbre, aporta con su feminidad, intuición , creatividad , perseverancia y visión amplia un horizonte más grande en el derecho dando vida y encarnando justicia.

María del Carmen


Más que nunca, permanezcamos unidos en la defensa por la igualdad de género.
El camino es largo, pero continuemos en la lucha por erradicar cualquier atisbo de machismo contra las mujeres, contra la violencia de género, el acoso y la brecha salarial.
Por todas aquellas mujeres que ya no tienen voz, por todas las víctimas, por las que continúan trabajando en pro de los derechos de las mujeres y niñas, por esos hombres que defienden la igualdad de género en nuestras sociedades.

Manuel


SOLIDARIDAD CON NUESTRAS COMPAÑERAS abogadas de profesión y ayudarles en momentos como la maternidad donde se encuentran con dificultades para atender sus asuntos y juicios.
Celebrando juicio penal, el juez no entiende porque no aprovechó la ausencia de la Acusación Particular y le dije que es motivo más que justificado su embarazo, sería un acto antiético y reprochable no respetar a la compañera en esas circunstancias. Desde entonces cuando veo una letrada embarazada me pongo a su disposición.

Alexandra


Igualdad decís?, Igualdad, es tener los mismos derechos que el resto de trabajadoras que pueden dar a luz por ejemplo sin tener que seguir trabajando, sin estar pendiente de vistas y señalamientos; igualdad es poder conciliar la vida familiar y laboral; igualdad es tener derecho al descanso tan merecido para todas las abogadas; igualdad es cobrar un salario o retribución digno por las guardias y oficios……….;¿Que estais vosotros/as dispuestos/as a hacer para cambiarlo?

Soledad


En una España en la que disfrutamos de leyes igualitarias para todas las personas independientemente del sexo, religión, ideología…etc, debemos trabajar por la equiparación e igualdad real en el cuidado de los hijos, los cuales son los que en su mayoría hacen que las madres optemos por su cuidado directo en detrimento de nuestro trabajo.
Solución: conciliación laboral y ayuda estatal hasta que los niños alcancen la mayoría de edad, incluyendo apertura de colegios por las tardes y vacaciones.

María


La igualdad comienza en nuestras casas, educando y siendo modelos de que el género no afecta al ejercicio profesional de cualquier ámbito. En esta profesión, cada día es más fácil conciliar, pero no todo está conseguido. Sigamos trabajando codo con codo, para que la igualdad sea real.

Luis


La mujer, al igual que el hombre, es una persona. Un ser humano. ¿Deberían existir diferencias entre los seres humanos? ¿Diferencias en el plano jurídico? ¿Diferencias en el trato personal? ¿Acaso no todas las personas que existen en nuestro planeta no pertenecemos a la misma especie? Y, como humanos que somos, muchas veces, nos empeñamos en dividir, señalar y separar. ¿Por qué no unir, abandonar el prejuicio y conocer? Reflexionar para que la mujer sea solo eso, una persona como cualquier otra.

Ángeles


Reflexiono: Mientras busco una demanda de ejecución de costas para no entretenerme, tecleando
silenciosamente, con sigilo, un ojo en el portátil y otro hacia el rinconcito donde duermen mis dos pequeños tesoros de 4 meses, y el pensamiento en terminar para dar la merienda a “mi mayor”. Reflexiono sí, en cómo conciliar dedicación familiar con llamadas, mails, notificaciones, plazos…; En fin, el trabajo de una abogada casi con jornada laboral permanente, nada con lo que una mujer no pueda!

Maria


El Día Internacional de la Mujer cobra enorme relevancia, con el único objetivo de reivindicar la igualdad en la profesión y acabar con ese techo de cristal existente. En nuestra profesión en concreto, se hace importante brindar un pequeño homenaje a aquellas que fueron pioneras en la profesión y abrieron el camino al resto y si bien es cierto que cada vez hay más mujeres juristas, debemos lamentar que aún un número muy escaso llegan a ocupar cargos de responsabilidad. Por ellas, por nosotras

Blanca


Me llama la atención que se siga utilizando el término “abogado” para referirse a una mujer que ejerce nuestra profesión. Desde que me colegié, he dicho que soy abogada. Entonces era más usual la utilización del término abogado para referirse a una mujer y dicha acepción estaba permitida por la RAE. Hoy día la edición vigente del DRAE registra “abogado, da” y ya no permite la forma masculina para referirse al femenino. Un cambio de criterio que visibiliza una realidad: Mujer y Abogada.

Jesús


El impulso de la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, reconocido como derecho fundamental y auspiciado por la norma del 2007, no alcanzará los objetivos propuestos hasta que exista una verdadera concienciación y sensibilización frente a la brecha de género que es imposible solucionar con una simple burocracia. La abogacía sevillana debe de configurar un ejemplo referenciadle que fomente y crea realmente en la igualdad efectiva de las personas que trabajan día a día por una sociedad justa.

Alba


Debemos seguir trabajando por la igualdad de la mujer en el sector, desgraciadamente me he encontrado varios despachos sevillanos dirigidos por hombres donde sólo contratan a mujeres porque, según sus palabras, no cuestionan las directrices como si lo hacen los hombres. Sin entender que dicha situación es producto de la educación recibida donde a las mujeres se las enseña a ser complacientes y serviciales, y siendo una situación claramente machista. Sigue habiendo situaciones machistas cuando hombres abogados invaden tu privacidad corporal, aunque sea levemente tocándote el pelo o el brazo, aunque sea de forma amistosa. Son situaciones que he tenido que vivir y nos hacen sentir muy incómodas.
Hay que reflexionar sobre este tipo de situaciones porque violentan a la mujer y pueden ser consideradas formas de acoso.

Concha


La creciente incorporación de la mujer a mayores cuotas de poder jurídico debe venir acompañada del reforzamiento de ciertos valores que realmente no son femeninos, sino universales. Se puede ser un gran abogado/a sin ser “agresivo”, sino tenaz y riguroso. La perspicacia no riñe con la empatía. La incondicional defensa del cliente no impide el respeto al compañero y a unas reglas del juego que son valores humanos que no atienden al género porque contribuyen a un ejercicio digno de la profesión.

Martina


Hay que hacer todavía mucho para lograr la igualdad de oportunidades personales y profesionales de mujeres y hombre. En la Abogacía faltan medidas efectivas para tutelar la conciliación familiar.

Ana María


Hola: Sí. Me declaré feminista y femenina desde que terminé la carrera de Derecho. Era consciente que iba a ejercer la profesión de abogado ya que desde mi posición podía promover la igualdad y la diversidad en el ámbito de la Abogacía.
Pensaba en una sociedad en la que hubiera más espacio para que las mujeres que quisieran pudieran desarrollar su carrera profesional. Lo conseguí. Puedo dar fe de ello. Pero no olvidemos nuestra feminidad y siempre al lado de los hombres, nuestros compañeros.
Pensaba, finalizada la carrera y ejerciendo, en una sociedad en la que hubiera mas espacio para que las mujeres que quisieran pudieran desarrollar su carrera profesional.
Estimo que vamos consiguiendo la igualdad efectiva de hombres y mujeres en las relaciones sociales y personales y aunque personalmente tuve alguna que otra dificultad, las superé y salí victoriosa de todas ellas.
Dejemos a un lado que en el año 2011 se cumplieron 100 años primera celebración día de la mujer, sigamos adelante.

María Enriqueta


Tomé la decisión de estudiar Derecho. Se lo comuniqué a mi padre y contestó que no era carrera para mujer. A punto de terminar la carrera, me aconsejó estudiar oposiciones. Tampoco le hice caso.
En 1996, era madre de tres hijos. No existía la conciliación familiar. El trabajo y el esfuerzo de estos años, han mantenido viva y activa la Abogacía.
La profesión de abogado, sea hombre o mujer, es fruto de la formación, capacidad, profesionalidad de aquel que se empeñe en serlo.

Jorge


Es gratificante, pasados los años, ver la normalidad o, mejor dicho, la habitualidad, porque lo anormal era lo contrario, de la incorporación de la mujer, de forma ya mayoritaria, en la Judicatura, Fiscalía, LAJs y, sobre todo, a la Abogacía, aunque queda por conseguir, para todos, mayores citas de conciliación de la vida personal y profesional. Pero creo que vamos por el buen camino!

Eventos #8M

Entrevista a la colegiada número 1 del ICAS

Entrevista a la colegiada número 1 del ICAS

Mujeres Abogadas